miércoles, octubre 18, 2006

El vino y la Salud



El consumo moderado de vino y su efecto beneficioso en la salud es una frase posiblemente muy repetida, ya que está avalada por los múltiples estudios realizados por los más prestigiosos médicos y expertos nutricionistas internacionales.

En términos más científicos el vino posee ciertos componentes, que actúan sobre los lípidos plasmáticos (básicamente el colesterol, HDL), las plaquetas o la coagulación sanguínea en la protección cardiovascular.

Cada día existen más evidencias que corroboran los estudios anteriores y se da un paso más. Se puede afirmar que el consumo moderado de vino ya no sólo es beneficioso para prevenir enfermedades de tipo coronario sino de tipo cancerígeno, diabetes o, incluso, de Alzheimer.
Lo más importante se centra en el consumo moderado de vino y una dieta equilibrada, sea en forma de vino tinto o blanco (30 gramos de alcohol por día o su equivalente habitual en volumen), es aconsejable siempre que no existan contradicciones de ningún tipo para ello.

La seguridad en el consumo del vino tuvo su primera demostración en Francia, en el año 1992, gracias al estudio de Serge Rénaud, "La paradoxe française". Bajo este título se pone de manifiesto, con ejemplos, como un país con riesgo cardiovascular similar al de otros países desarrollados tiene una incidencia de enfermedades cardiovasculares inferior a ellos.